¿Seguir la ciencia?

  • 4 years ago
“Seguir la ciencia” se ha vuelto un eslogan, pero ¿qué quiere decir realmente? Bueno, hay dos tipos de ciencia. La ciencia histórica supone darle sentido a lo que pasó en el pasado. Ya que la historia no se repite, explicaciones del pasado requieren suposiciones. La evolución, por ejemplo. Por otro lado, la ciencia experimental supone hacer experimentos en el presente para sacar una conclusión definitiva. Y resulta que la ciencia experimental refuta varios temas de discusión de los izquierdistas.

Por ejemplo, creen que hay muchos géneros, muchos sexos, y que podemos escoger nuestro sexo. Por lo visto no necesitamos los cromosomas. En serio, creen que los hombres pueden menstruar y tener bebés. No es científico, ni un poco. Más recientemente, afirman que el coronavirus se propaga más en eventos al aire libre, sólo que mágicamente no se propaga en protestas y disturbios contra la policía. ¡No muy científico!

No es sorprendente. Romanos 1:18-32 explica que cuando las personas rechazan a Dios, adoran cosas creadas y se vuelven tontas y depravadas. Mira a su alrededor, es fácil confirmar eso. De hecho, no participar en las ilusiones asquerosas de otras personas es considerado un delito de odio.
En fin, “seguir la ciencia” es un mantra religioso, una excusa conveniente para tomar el control de nuestras vidas. “Seguir la ciencia” es la excusa que las élites utilizan para desindustrializar nuestras sociedades. Destruir nuestra civilización para “salvar” el medio ambiente es igual a los confinamientos interminables, los que hacen lo mismo. Quieren que te sientas a solas y temeroso, que te vuelvas un esclavo. Quieren ser adoradas.

Luego meses de distanciamiento antisocial y arresto domiciliario, muchas personas se sienten aisladas. Satanás utiliza el aislamiento para hacer que te sientas a solas, desesperado e impotente. Cuando Juan el Bautista estaba en la cárcel, comenzó a dudar de Jesús. ¿Y cómo respondió Jesús? Animó a Juan por señalar sus milagros y dijo: "Dichoso el que no tropieza por causa mía."

Muchos obedecieron los confinamientos religiosamente porque tienen miedo de morir. Pues, el que tiene miedo no abraza, no acepta el amor de Dios completamente. No hay razón para temer la muerte. Jesús nos liberó de su poder. Leva cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo. Reprende todo miedo y sustitúyelo por los hechos: Dios no nos dio un espíritu de miedo, sino el Espíritu Santo y él nos da poder, amor y disciplina. ¡Mantente firme en la fe!

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